Son muchas la dudas que invaden a los profesionales de RRHH o directivos a la hora de seleccionar un buen coach. ¿Es mejor un coach con experiencia como directivo o no es necesario? ¿Qué significa que esté acreditado? ¿Qué preguntas debo hacer para no equivocarme?
Estos son los 7 errores que principalmente se cometen a la hora de seleccionar un Coach:
Error 1: Pensar que si un Coach le ha ido bien a una persona le tiene que ir bien a otra.
Los procesos de coaching los definimos como “soft”, es decir actúan en las habilidades de los directivos o mandos intermedios y en su capacidad para extraer lo mejor de sí mismos. Esto quiere decir que debe haber un feeling muy bueno y la confianza entre ambos debe estar escrita con mayúsculas, por lo que el cliente se tiene que sentir extremadamente cómodo y apoyado por esta figura.
Error 2: Creer que un exdirectivo es el mejor Coach para un directivo o un jefe de equipo.
Los exdirectivos son excelentes mentores de directivos más junior. Son personas capaces de transmitir un conocimiento recogido a lo largo de los años. Sin embargo esto no significa que el exdirectivo sea un buen coach. A diferencia del mentoring (transmisión de conocimiento y sabiduría), el coaching está centrado en los bloqueos internos de la persona con el fin de poder desarrollarla y en menor medida en el uso de herramientas de tipo consultoría.
Error 3: Buscar coaches especializados en ciertos sectores.
Aunque es un error que cada vez se comete menos, todavía veo que en algunas empresas se buscan coaches que hayan trabajado en el sector del marketing porque van a “coachear” directivos de una empresa de marketing.
Cuando un coach es profesional es totalmente polivalente y trabaja sin problemas en diferentes sectores y eso es lo que hace que enriquezca su visión global de cara a un directivo.
Error 4: No contratar un Coach certificado por ICF o por otra asociación con reconocimiento internacional.
Que una persona tenga una acreditación internacional como la ICF no quiere decir que sea el mejor coach para su empresa, sin embargo da cierta garantía y cada vez los directores de RRHH exigen más garantías a la hora de contratar estos servicios. Además es importante saber distinguir los diferentes niveles de certificación en función de los estándares que han podido alcanzar estos coaches y del número de “hora de vuelo” que posean. Así en la Federación Internacional de Coaching tenemos los niveles ACC (Associate Certified Coach), PCC (Professional Certified Coach) y MCC (Master Certified Coach).
Error 5: Elegir un Coach por sus años de experiencia
No es lo mismo haber trabajado 10 años como coach que tener 2000 horas en sesiones de coaching profesional. Al igual que a un piloto no se le mide por los años que lleva desde que acabó su formación, a un coach no se le debe de medir ni por sus canas ni por los años que lleva haciendo coaching, sino por sus horas efectivas.
Error 6: Elegir un Coach que no se mentorice habitualmente.
Cada vez me encuentro dentro de procesos de selección de coaching, en donde se exige que el coach elegido se haya reciclado y esté puliendo constantemente sus competencias.
Error 7: No tener el coraje de despedir a tu Coach
Un proceso de coaching tiene que enriquecer desde el minuto 0. Despedir a tu coach no es malo ni negativo, incluso es positivo. Si sientes que tu crecimiento con esa persona se ha estancado, cambia de coach, te vendrá bien un cambio de estilo y aprenderás más sobre nuevos enfoques.
¿Te ha interesado este artículo? Síguenos en Follow @Execoach Y apúntate a nuestra Newsletter mensual para recibir artículos prácticos para tu desarrollo profesional.